jueves, 25 de septiembre de 2008

Aquellas maravillosas parties...

En un domingo con un sol radiante, regreso a mi casa a mediodía, tras cerca de 11 horas de party ininterrumpida (que se dice pronto)...

Pensaba que iba a ser difícil, e incluso imposible, superar ciertas fiestas que se convirtieron en "míticas" en mi vida nocturna, pero me equivocaba.
De nuevo, lo hemos conseguido.

Y estoy segura de que la cosa no va a quedar ahí, y voy a tener más fiestas inolvidables junto a mi sister, que es en parte, culpable de ello.

Por eso, dedico esta entrada a mi hermana, La Instigatriz, que hace posible que, party tras party, nos superemos, y, por qué no, a la providencia festera, que nos ha sido propicia en todos estos años de jolgorio nocturno.

Gracias a "ambas dos", y que la fiesta continúe...

Ah, aquellas maravillosas parties...

lunes, 1 de septiembre de 2008

El placer de lo normal

¡¡Qué agradable es hablar con gente NORMAL!!
(Y digo "normal" en el inmejorable sentido de la palabra)

Hace poco quedé con una persona y estuve hablando con ella (cosas que haces cuando quedas con amistades jajaja) y sé que esta persona no es consciente, pero me hizo recuperar la fe en la humanidad... Qué heroico suena ¿no? jajaja.

Pues más bien sí, sobre todo para mi, que estoy rodeada de la "gente" (o parecido o similar) de la noche; al final acabas creyendo que estas personas son una muestra representativa de la población y... Va a ser que no.

Por ello dedico esta entrada a la gente NORMAL, con letras mayúsculas; esas personas que no son fantasmas, ni pretenden serlo, simplemente son estupendamente normales, personas con las que puedes tener una conversación divertida, inteligente e interesante.

Realmente no sabía cómo escribir esto (últimamente no es que esté muy orgullosa de mis entradas u_u) sólo me gustaría que se entendiese lo que quiero expresar y espero que esa persona lea esto y piense... ¿Seré yo de quién habla? Porque, por supuesto, no voy a revelar su identidad jajaja así más suspense :P

¡Ah! Querida campana de Gauss, nunca creí que fuese a amarte tanto...

(Ojalá a la gente se la pudiese tipificar...)